El mundo no hace más que gritar en esta luna gris de granito. Las hojas de planta bailan solas. Solas y sin aroma bonito que acompañe su vaivén dichoso Qué triste triste es bailar solito por cada palmo de arena gris, en esta luna gris de granito. Y es que en todo todo palmo gris de polvo de luna gris de granito no hay nada más que las hojas verdes balanceándose. A poquitos, ni muy muy fuerte ni sin dejarse, no más que a merced del ventecito. A veces me siento planta verde; su viento parece mi destino. Me quedo frío en la luna gris; viento sin baile, plantas y gritos. Solo me quedo con tristes plantas; sólo anhelan quien baile consigo. ¡Qué pena! Que ahora es el viento quien por nosotros ha decidido dejar estéril de olor a esta luna sin nadie que baile en su granito.
Un blog de escritura. De letras que vuelan y no saben adónde. Pero te digo de corazón que todo tiene alma aquí.