Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2012

Favoritos de Autor

¡Uf! Muchas entradas son ya, ¿verdad? Casi 140 entradas y dos obras de teatro. Bueno, a vista de esto, he pensado que podríamos ordenar las entradas de otra forma... He hecho otra sección llamada "Favoritos de Autor" en las que están todos los escritos que para mi han sido  los mejores, y para los que no leen habitualmente el blog, pueden ir directamente ahí a leer las mejores entradas que se han escrito en esta página. Muchas gracias a todos los lectores que me siguen y que me leen. Agradezco vuestro tiempo, de verdad. ¡Una luz para vuestras sombras! Shathu =).

Blanco y Negro

Iba paseando, aislado por la calle. De noche. Con esa repentina sensación del olvido que viene cuando desvías tu conciencia a tus sentidos, mirando al suelo, u oyendo los coches, por ejemplo. Tenía un cuaderno en mi mano. Me representaba muy bien. Yo era un tanto bipolar. Tenía la portada en blanco y la contraportada en negro. Siempre iba abrazando el cuaderno, donde contaba y guardaba mis historias y mi diario, incluso. Me gustaba abrazar la portada por el lado blanco hacia mi. Sentía que las cosas que escribía eran más personales. Mas mías. Hasta que un día vi a unos niños jugando en un parque. Al principio me desbordó una sonrisa acompañada de unos cándidos ojos marrones que me miraban. No pude evitar sonreír ante su inocencia. ¡Estos niños...! De pronto, el niño se acercó mirando mi cuaderno con la inquietud propia de un niño y me dijo  -"¿Qué llevas ahí?" -"Un cuaderno. Escribo a menudo". -"¿Puedo verlo?"  -"Sí, claro"

La Cuenta Atrás

Uno. Dos. Tres . Cuatro. Cuatro pasos hasta la puerta. Aún me parece que está lejos. Uno. Dos. Tres. Cuatro. El miedo me ausenta. mi conciencia es un preso. Uno. Dos. Tres. Cuatro. Cinco. Seis. ¡Despierta! ¡Vamos! ¡Hazlo, viejo! Cuatro. Cinco. Seis. Siete. Miedo: Odio los precipicios Creo que puedo tropezar. Cuatro. Cinco. Seis. Siete. Prudencia cuando es miedo es vicio. La virtud se pierde al esperar. Cuatro. Cinco. Seis. Siete. Uno. Sólo quiero un indicio. Uno  sólo de que voy a acertar. Siete. Ocho. Nueve. Diez. Diez segundos viendo pasar el tren. Diez segundos y no reaccioné. Siete. Ocho. Nueve. Diez. Mi vida se para en el andén. Pero la suya no la salvé. Diez. Once. Doce. Trece... Trece. Doce. Once. Diez... El tiempo pasa... y yo también.

Carta para lo que Una Vez Fui

Hola. cuanto tiempo, ¿eh? La verdad, hoy en concreto no sé bien qué decirte. Sé que muchas veces te he puesto a parir. Me he hinchado a decir en mi mente y en mis escritos que, aunque aprendí de ti (y en cierto modo sigo haciéndolo) fuiste lo peor de mi vida. Sé que nunca he confiado en ti. Ni en mi. Quizá porque nunca nos hemos parado a mirarnos a la cara. Siempre he querido volver a ser tú. A ser esa persona con tantos y tan bellos defectos infantiles (que aun siguen conmigo). Suelo pensar a menudo en cómo sería si nos encontrásemos. Qué te diría. Qué me dirías tú a mi. Quizá nunca te vea en el espejo que ahora me miro. Quizá el niño que fui está demasiado dormido en mi mente. Quizá sea el momento de poner una vela a mi infancia en vez de quemarla en el imposible olvido. No lo sé. Sólo sé que espero que el autor de esta carta sea el mismo que su destinatario, espero pues que me perdones y espero haber conseguido perdonarte, pero, por primera vez, después de tanto tiempo, quizá

Compañero de Cama

No estoy seguro de quién me mira. No estoy seguro de quién me cura. Miro al aire y nadie mira. Miro al cielo y no me ayuda. El cielo es mi espanto en la penumbra pero mi salvador cuando es de día aunque es vano el sol que me deslumbra. Cuando cae la noche y el miedo alumbra me hago una pregunta que nunca diría: Si estoy tan solo y mi miedo me oculta, ¿Quién cuida y duerme con la luna? A lo mejor ella también se lo pregunta...

Paso a Paso

Oigo poco a poco los latidos de mi corazón. Oigo a cada segundo un hola y un adiós. Oigo cada vez que suena y cada vez que no. Me despierto. Estoy ya de pie. Callado Voy oyendo débiles mis latidos mermados Escucho el agua que moja mis zapatos. Abro los ojos. No veo nada. Veo vacío. Me mareo pues no veo. Se cae mi brío al suelo, y su agua latente me da frío. Estoy empapado en este túnel sombrío donde solo estoy yo, y sólo yo hago ruido. No veo alrededor. No veo de donde he venido. El agua me calma y me cura, falazmente me duerme. Tumbo en silencio mi mente y mi cuerpo poco a poco desciende. Estoy apoyado y tumbado en el líquido. Estoy inmerso en la muerte. Casi lívido. Estoy perdiendo la noción de mi físico. Veo extrañas formas oscuras y colores Deliro. Dormido. Atado. En dolores que no siento al no sentir mis hervores. Me estoy muriendo y a penas soy consciente. Mis párpados empiezan a no moverse. ¡DIOS! Un rayo de luz me atra

Contéstame, Pluma

Pluma, contéstame, ¿Qué debo escribir? Mis sentimientos vacíos no se pueden partir. Pluma, contéstame ¿Qué debo hacer? Juego contigo a un tarot que no puede responder. Pluma, contéstame ¿Por qué está manchado este negro papel? Ya se ha marchitado. Pluma, contéstame ¿Por qué dudo de ti y aun así te pregunto? Creo que me pregunto a mi Pluma, contéstame ¿Por qué hablo de ti si fue con un bolígrafo con lo que te escribí?

Anarquía

¿Que es Anarquía? ¿Alguien lo sabe? ¿Alguno se ha parado a pensar lo que vale? No. No son idiotas. Ni gente agresiva. Son gente que lucha por una buena vida. No. No inducen maldad ni conflictos, en verdad. son gente que lucha por la veraz igualdad. Quien diga ser anarquista sin realmente escuchar no tiene ni idea de lo que es luchar. Luchar es apoyar al ideal. Os critico, falsos anarquistas que no aceptáis la piedad con vana agresividad. ¿Qué es la anarquía? Es la política utopía. En la que creen los que sueñan y aborrecen los que ignoran. ¿Qué es la anarquía? Donde no hay jerarquía sólo funciones, sin estatus sin vanidad, ni hipocresía. ¿Qué es la anarquía, en verdad? Una quimera, un simple sueño. Pero mientras un deseo no muere su futuro se hace eterno. 15º Tributo a... La Anarquía  (era obvio, ¿no?)

El Pescador

Fue hace tiempo. No fue hace demasiado tiempo, pero sí el suficiente para romper una barrera. Un estela desde el cielo, vislumbraba una cadena de acontecimientos que mostrarían nuevos ojos. En un lugar recóndito de un mundo extraño, se encontraba un pescador, labrando su pesca cotidiana, sin prestar más atención que a los peces que pescaba y pescando sin cesar. Un día, de pronto, se dio cuanta de que algo no marchaba bien, algo faltaba. Cada día iba pescando menos peces  y su lago de siempre se iba secando poco a poco. Hambriento de vocación y estómago, decidió mirarse en el espejo donde pescaba todos los días. Miró su reflejo y no vio nada más que una persona sola y desamparada en un viejo mundo arduo y apenado por tanta sequedad y exceso de hambre. Se sumía a veces en su tristeza Los días iban pasando cada ves más lentos. A medida que el sol se iba oscureciendo, su hambre iba creciendo y el lago se iba secando. El sol desaparecía a medida que crecía su miseria. Poco a poco em

La Bruma

Una pared de gomaespuma me protege del viento, de los fríos puñales y de algún desacierto pero no de la bruma. La bruma me defiende pero me deja ciego. No sé como poner sonrisas en el desasosiego. ¿Qué pretende? La blanca oscuridad de esa grisácea bruma de agua infectada solo suma y suma una inútil tranquilidad. ¿Qué es de los sueños cuando creo vivir? Sueño lo que vivo pero no sé qué es sentir pues lo bloqueo. La tensión es inherente en mi absurdo ser que ha dejado de hablar, que ha dejado de ver, y ha dejado de obedecerme. Intento ser yo, siendo tu eres tú quien me controla. eres tú mismo el que escribe. El mismo que no demora pero controla su virtud. La luna se siente sola y yo estando solo, no lo siento. Siento soledad si estoy con gente Siento soledad, y me miento cuando retraso la hora y dejo para otro momento lo propio de mi persona y me sacrifico. ¿Me estoy sacrificando ahora? ¿Escribo l