En esta habitación oscura un foco de luz recorre todo lo que está al alcance de mis ojos. En esta habitación he pasado grandes noches, caballos de recuerdos y espadas de querellas. Una habitación oscura. Sin velas, ni lámparas ni amores que prendan este oscuro cuarto sin muebles. En esta habitación he disfrutado mucho y también sufrido más de lo que me gustó. Pues nunca he visto más luz que la luz que está al alcance de mis ojos. En esta habitación he llorado, he querido amado, golpeado paredes, besado, gritado y follado. Y ahora veo esta luz - la misma de siempre - iluminándome. Como un túnel claro. Un pasaje intransitable sin apenas rumbo fijo. - Porque es maldita luz, y la luz no guía vidas-. Pero la quiero, la admiro, la deseo, le lanzo flores de palabras, la sigo con la mirada mientras amo, odio, beso, follo, decido, lloro, golpeo paredes, me arrepiento y me alegro. Y sé que la luz es luz y no es mis pasos. Pero también...
Un blog de escritura. De letras que vuelan y no saben adónde. Pero te digo de corazón que todo tiene alma aquí.