El Pasado Presente

Cuanto tiempo fuera
que mi pasada desdicha entera
mi corazón aguarda
y es ahora cuando descarga
en la infancia la ira
como una prisión que tira
del prisionero que la aguarda.

Como un bucle sin sentido
mi pasado ha venido
recordándome con encanto
que tuve una vida de llanto
y de gente aislado y cautivo
bajo un cordón nativo
que me burla con su canto.

Aquí expongo mi espanto,
mi soledad y mi santo
mal esmero en que me vi
aunque tan solo fue así
durante un breve instante:
infancia de soledades
y necias maldades
hacen el futuro resultante.

Por suerte esto ha cambiado
y mi vida ha resultado
un punto de ayuda entre la gente:
una convergente lente
que a toda la gente ayuda.
Con experiencia menor que Bagdad
en amor, ciencia y sociedad
sin lucro salvo sin duda.

Pero a las pruebas me remito:
¿Por qué con tan poquito
de "polvo de locura"
se hace ver en blancura
la envidia de mi deseo?
por aquella inexperiencia
en sociedad, amor y ciencia
en tal mal me veo.

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El espacio en que fui tuyo

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Recuerdos como noches

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Un soneto de tres

Por hoy somos tres. Madre, padre e hijo. Aunque no siempre fuimos tres, pues fuimos cuatro. Luego el desahucio vivimos. Tres vivimos el vivir sin cobijo. Aquí somos tres. Madre, padre e hijo con vidas distintas que distinguimos viviéndolas. Juntos y no. Es un timo de envejecer y el tiempo, que no elijo. Y un día tres serán dos, y dos, uno. De pronto "juntos" pasará a ser "no". Y poco hay entre "juntos" y "ninguno". De un algo que estuvo y se marchó el uno que quede será el "alguno". Uno entre paredes de lo que amó. Imagen generada con Flash 2.0 (Google) de ©Shathu Entayla

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