Ir al contenido principal

Amores singulares, en plural

Y mirarte a los ojos
y morirme de hambre
por querer abrazarte
por bailar en tus lirios.
Porque yo codicio 
almas con la piel
y no es lo mismo
que codiciar solo las pieles.
Porque quiero el calor que dan
y no la sangre que tienen.
Porque un alma sin viajar 
a ninguna piel pertenece.
Yo pertenezco a quien me quiere.

Y viajo de mí para tí.
Quiero anidarme en tí 
como el rocío a la tierra
como el calor a la piedra
como un romance en abril

Quiero enternecerme en soñar
tu cobijo.
Quiero enternecerme en ti
y eso elijo.
Quiero que seas ese lugar
donde perderme y bailar
sin pasadizos.

No sé quién serás, y no importa.
Si me amares, es lo mismo.

Pero luego te miraré reflejando
tu amor
porque, aunque para ser amado
todo cariño es prolijo,
tu color
para amarme
cambiará los ojos
con que te elijo.

Ven a besarme y a abrazarme
y viajaré rápido al suicidio.
Porque matarme por elegir amor
no es más que vivirme en otro sitio.

Ámame, que eso quiero.
Que cuando falta, de amor, alivio
todo los besos son bonitos
pero cuando me beses tú
(que no sé quién serás, insisto)
pasaré de querer amor
a, con todos los gustos, elegirlo.

Y si crees que frivolizo 
con el amor
piensa que es más frívolo 
quien no vio
todos los amores que ha recibido.
Lo pensarás en el ultimo abrazo
que te dé nunca un amigo.
Lo harás también con la familia 
y con quien te bese los domingos.
Harás el amor y amarás 
a tus amantes, familia y amigos.
Y todos esos amores se desean
y en el fondo, son lo mismo.
Las formas de amar son colores 
con lo que decoran tu cobijo.
Y tu cobijo lo forma quien te ama
sea cual sea su cariño.

Que el amor por la familia no es más limpio.
Que el amor, si es amistoso, no es más tibio.
Que el amor, si es lujurioso, no es más chico
(Ni ha de ser per sé más grande, sea dicho)
Que el amor, por escaso, no es más cierto
ni, por ser plural, es más nimio.


Foto de Fiona Murray en Pexels


de ©Shathu Entayla

Comentarios

Popular Posts

El resquebrajo

Y de pronto el resquebrajo que ya sentía sólo sirve para acabar de romperme, y los pedazos de mí se clavan en mi capacidad de dormir, de sonreír y de querer la vida. Yo, que siempre fui la Antígona que va a morir por lo que le importa pero que se desnuda para sentir el aire frío y sentir que está viva. Yo, la Antígona, que muere cuando su hermano muere por segunda vez, está vez en el destierro de su cadáver. Yo, como ella, muero. La vitalidad de Antígona se va en su muerte. Su muerte es su muerte. Pero mi muerte es la vida.  El resquebrajo es como un desprendimiento: había indicios, pequeñas señales que el monte iba a caerse, pero de repente se cae, y parece que nunca hubo aviso. O que daba igual que lo fuera, porque era inevitable. Parece un capricho de Dios. Parece que no había nubes de tormenta. Pero, de repente, todo es barro, todo es polvo. Todo es hiel. El resquebrajo ya no es tal. Ya estoy roto. Como están rotas las conchas de mar llevadas por el agua. Como el mimbre cuando ...

Tener libido es de aliens

Leo una novela erótica. Me enternece la complicidad. Se ponen a follar. Me pongo nervioso. No cachondo, no. Nervioso como el gerbo que huye. Leo el polvo como leo un epitafio y me fuerzo a acabar el capítulo. (Aunque los nervios no querían). Una, tiene un orgasmo: vital y místico. Otro, no se corre pero: vital y místico. Se despiden. Se besan . Me enternece la complicidad. Acaba el capítulo. Cierro el libro. ... Me entran ganas de llorar. Acabo de leer sobre aliens. Los aliens no son de mi especie. Funcionan distinto. ... Me entran ganas de llorar. porque yo antes era un alien. Siento que nunca he follado. La parte de mi que folla se ha roto. Siento que nunca he querido hacerlo cuando siempre tuve luciérnagas en los ojos con los que miro todo. Algo de mi alma se ha roto. Y estaba en mi cuerpo. Y, dentro de mi cuerpo, en mis ojos. Algo de mi alma se ha roto. Algo vital y místico, como en ese polvo, que ahora es polvo de mis ojos. de ©Shathu Entayla